Pletóricos Raphinha y Lamine Yamal llevan al Barça a cuartos
- InterFut
- 11 mar
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Barça y Benfica se volvían a ver las caras, pero esta vez en un partido que lo definía todo. Los locales, pese a jugar sin Cubarsí, venían con ventaja tras haber conseguido una valiosa victoria en Lisboa con un glorioso Szczesny.

PREVIA
Hansi Flick salía con su 11 de gala, cambiando a Araujo por Cubarsí, sin muchas sorpresas.
Por su parte, el Benfica de Bruno Lage jugó con un 4-3-3 con Florentino Luis que ya volvía a la titularidad después de lesión y con Samuel Dahl, que sustituyó a Álvaro Carreras, que le había complicado a Lamine Yamal en cada partido que se enfrentaban.
PRIMERA PARTE
El partido empezaba como se preveía: intensidad muy alta, presión arriba, ocasiones para ambos equipos y un ida y vuelta constante. De hecho, así llegó el primer gol; tras una genialidad ‘Messiana’ que dejó plantado en el suelo a Florentino Luis (recordando a la mítica jugada de Messi con Boateng) y se inventó una asistencia antológica a Raphinha que decidía a placer.
Dos minutos tardó en reaccionar el Benfica que, en un córner, empató Otamendi para seguir creyendo. Aun habiendo empatado el partido, parecía que al Benfica le vino mal su gol; el Barça empezó a dominar, tocar y a someter a los lusos y no paró hasta el minuto 27, cuando Lamine Yamal, insistiendo en emular a Messi, hacía un recorte típico del astro argentino hacia dentro y clava un golazo para adelantar a los culés.
Y cuando parecía que se iba a acabar el primer periodo, Balde, que también hizo un buen partido, se la deja en bandeja a Raphinha para firmar su doblete e irse al descanso con una ventaja de 2 goles.
SEGUNDA PARTE
El segundo acto empezó similar al primero, sin embargo, tras el gol anulado a Pavlidis en el 49, el partido se tranquilizó más, con un Barça que sabía que no se le tenía que descontrolar el partido.
La más clara de los locales llegó en el 64 con una jugada que empezaba De Jong con una conducción majestuosa y, tras una serie de toques, la remataba fuera el propio centrocampista neerlandés.
En el 75 el Benfica tuvo una doble ocasión clara pero no fueron contundentes y, pese a reclamar un posible penalti por mano de Íñigo Martínez, la jugada se quedó ahí, sin crear peligro real en la portería de Szczesny, que hoy estuvo muy tranquilo.
Y así, con esta amplia y merecida victoria, el Barça espera rival para cuartos dejando sensaciones de ser el equipo favorito para levantar la orejona. El Benfica, en cambio, se despide de la Champions habiendo competido al más alto nivel y plantando cara a los más grandes.
MVP: Raphinha
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